En Ese Viernes Espantoso los protagonistas de esta obra son los jóvenes y también los mayores ávidos de una lectura ágil e ingeniosa. La aparición sin vida de la bibliotecaria de la escuela a la que concurren Constanza y Toribio promueve dos grandes interrogantes: Suicidio? Asesinato?. La primera hipótesis, dado el hermetismo del recinto en el que tuvo lugar el episodio, sería la más verosímil, si no fuera que los jóvenes sospechan de unos polucionistas denunciados por la víctima y de una secta a la que la víctima concurría.Las vicisitudes de este simpático binomio, sin embargo, no empañan su desenvolvimiento cotidiano, compuesto del amor que se profesa, la comercialización de salchichas y gaseosas en los estadios y las expectativas por parte de Constanza de prosperar como empresaria y de Toribio de convertirse en un ídolo roquero, sino que todo se entremezcla y nutre recíprocamente hasta el sorprendente desenlace.
Galtero, quien ha coordinado numerosas colecciones por el estilo, ratifica una vez más su familiaridad con un género que lo cuenta entre sus más exitosos animadores.
