El libro describe los primeros días del comienzo de la Revolución Comunista en China, particularmente en Shangai, una vez que las fuerzas del Kuomintang y el general Chang Kai-chek han conquistado el poder político, y se aprestan a reprimir a las organizaciones de campesinos y trabajadores que se han resuelto a seguir una huelga general de tendencia marxista. De la misma manera, el terrorista Chen, el intelectual Kyo o el maestro Gisors conviven con los sucesos de una manera descarnada, desmenuzando y objetando las posibilidades de la lucha y tomando parte activa en aquellas acciones que definirían el inicio de lo que sería la Revolución China en 1927.